Internet y las redes sociales se están convirtiendo en un canal de promoción y venta en todos los sectores económicos. No obstante, en la red de redes el sector turístico tiene un perfecto aliado. Y es que, según un estudio de Facebook y Deloitte, el 83% de los usuarios utiliza internet mientras está de vacaciones, un tercio accede a su perfil de Facebook en su lugar de vacaciones, el 48% sube fotos de sus vacaciones a Facebook cuando regresa a su casa y la mitad ha dado al ‘me gusta’ a una marca turística en Facebook. Esto quiere decir que hoy es necesario estar donde están los clientes y los clientes potenciales, y todos ellos están en las redes sociales.
Y es que los canales digitales son la segunda fuente de ideas de viajes. De hecho, los viajeros utilizan las redes sociales en todas las fases del viaje (desde la búsqueda de una idea de destino, hasta la planificación del mismo). Es ahí donde los hoteles y los destinos turísticos tienen la oportunidad de llamar la atención de su público objetivo y jugar un papel importante en el cambio del comportamiento del consumidor.
Para tener éxito en el ámbito virtual es necesario disponer de productos susceptibles de ser compartidos, convirtiendo al famoso selfie en una herramienta de promoción turística y permitiendo que el cliente pueda decir dónde está y qué está haciendo de una forma rápida y gráfica. Esto lleva al sector estar presente en Facebook y Twitter, pero también en Instagram, Pinterest o Youtube. De esta forma, el viajero puede recrear sus vacaciones sin levantarse del sofá antes de que estas empiecen, y después, compartiendo su experiencia.
En esta apuesta por la innovación, no hay que olvidar las plataformas móviles, que se están convirtiendo en un dispositivo importante en la industria turística. La automatización, la gestión hotelera basada en la nube y ofrecer una experiencia móvil resultan también claves para la nueva generación de clientes.