Ya está todo preparado para que la isla portuguesa de Madeira celebre por todo lo alto su particular fiesta del Vino, que se celebra del 28 de agosto al 11 de septiembre. Una cita que los amantes de la naturaleza, la gastronomía y, por supuesto, la gastronomía del archipiélago no se pueden perder.
La Fiesta del Vino de Madeira es uno de los reclamos turísticos más importante del jardín flotante del Atlántico y da tributo a uno de los recursos económicos de la isla. Este evento se realiza desde finales de los años setenta del siglo pasado; se iniciaron en Funchal e incluye, en su programa, la Semana Europea de Folclore (que tiene como objetivo promover la interculturalidad y dar a conocer las distintas realidades etnográficas) y la Fiesta de las Vendimias (en una quinta madeirense se inicia la vendimia y todo lo que ella conlleva, envuelta en un ambiente festivo sin igual).
El vino de Madeira es de fama mundial. Ya en el siglo XV los madeirenses comenzaron a exportar sus deliciosos caldos a toda Europa, regando las gargantas de la nobleza del momento y conquistando los paladares de los más exigentes dirigentes políticos a lo largo de la historia.
